El viernes pasado dí en facebook el resultado del concurso que se hizo en Milimétricas. La ganadora fue Clara Fernández Pertierra. Ella quería un proyecto de decoración para la habitación de su hija. Ha comprado un piso nuevo, se lo dan el año que viene, pero ya está dandole vueltas a como decorarlo.
En Milimetricas siempre presentamos dos versiones de un mismo proyecto. A veces una Low Cost y otra más cara, otras veces de diferentes estilos, o con pequeños cambios y en distintos colores.
El concurso no es menos y también ofrezco dos versiones de la misma habitación.
A continuación os presento la primera de ellas.
La madre quiere una habitación seria, elegante y formal. La hija, como chiquitina que es quiere una habitación de princesa. Yo con esta primera versión he querido contentar a las dos. He empleado mucho el rosa, blanco y el fucsia, para contentar a Adriana (la niña) además de proporcionarle un montón de espacio para juegos. Para contentar a la madre he incluido un montón de sitio de almacenaje para ropa y para juguetes. La mejor manera que aprendan orden es teniendo sus propias cositas en su sitio. Y que mejor manera que con unos muebles adaptados a los más pequeños.
Divido la habitación en tres zonas. La primera a la izquierda para que juegue, pinte y coloree como buena niña chiquita que es. Tiene juguetes y libros a mano. Para poder usar y guardar ella misma. Hacia la zona central una alfombra grande en la que sentarse a jugar a las muñecas, cocinitas, cochecitos... Tambien en esa zona una cama a modo de tatami: bajita, cómoda y práctica. Esta se irá adpatando a medida que crezca . Cuando sea adolescente le servirá tanto para dormir como a modo sofá para sentarse con sus amigas y contarse así cómodamente sus secretos.
En esta zona central, a modo de mesilla de noche, he colocado dos baules. Encima de estos una lamparita, un cuadro a modo de adorno y un despertador para levantarse a tiempo todas las mañanas. Ahora que es pequeña le servirá para guardar juguetes, ropa de una temporada a otra, o ella misma si se da la ocasión. jajajaja. Cuando crezca podrá guardar desde zapatos a libros u otras cosas de poco uso.
La tercera zona diferenciada es la de estudio al margen derecho y bajo la ventana. En ella situo un tablero que va de lado a lado permitiendo poner libros, ordenador, impresora y sobrando aun así sitio. Debajo de este en el lado derecho una estantería abierta para los libros del cole que use diariamente. Y en el lado izquierdo y debajo de la mesa otra zona de almacenaje con puerta para guardar textiles de cama, más juguetes o lo que sea necesario. Encima de la mesa de estudio y al lado izquierdo de la ventana he puesto 3 baldas donde podrán dejarse cuentos, juguetes... Todo ordenado, todo a mano.
En la habitación predomina un rosa muy claro. El punto de contraste lo marca algunos textiles, stickers y la mesa de estudio en rosa fucsia. Además de un fantástico mural de orquideas rosas que se ha incluido en las puertas del armario.
Enfrente de la cama hay una comoda doble con frentes en cristal templado blanco para que la habitación no se haga tan recargada. Al lado de esta y más bajita una estantería con cajones de plástico para que ella misma deposite sus juguetes después de jugar en la alfombra. Después de jugar hay que ordenar.
Para romper con tanta linea recta y hacer una habitación más divertida, como toda habitación infantil debiera de ser, he puesto unos espejos en onda y una lampara de lineas sinuosas. Aunque lo mejor de todo es la lámpara XL cuyas flores visten sutilmente la habitación cada vez que es encendida.
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